Aug 30, 2013

Pero fue un día gris.

Era un día gris, ya todos lo sabíamos. Sin embargo, se hablaba del color del sol, del calor de la noche, de la luz por la ventana. La mentira nos corroe a todos por las entrañas, como aire, o tal vez como sangre.

Llegó a mi vida el reto menos importante pero más esperado, de esos que uno quiere por el hecho de que no son retos, por la mediocridad que tanto amamos aunque en otros la critiquemos, por las acciones que sabemos hacer porque algún ingenuo nos hizo creer que así era. Pero no. En realidad no sabemos. No sabemos nada.

Era un día gris con un reto insignificante. Como una computadora sin prender a media noche, como una taza de café manchada en el borde, o aún más molesto, con café calentado en el microondas, ¡pecadores!


Mientras se hablaba de la luz del día gris, un rayó atravesó el cielorraso para llevarse consigo las vidas de todo el que reía cínicamente, y desperté. Desperté como si nada hubiera pasado.

Ducha, más café, cigarro. Abrir los ojos y olvidar que un simple día gris se pudo traer abajo el reto más fácil para mí, hacer las cosas bien. Otro cigarro y ya no hay más tiempo para lamentar.

ART

Ya no puedo hacer ni lo que sabía hacer con los ojos cerrados. Ya el piano se me llenó de polvo y las manos no se mueven por sí solas. Ya la voz no me sale ni ronca ni afinada, no sale. Pero pasó el día gris, se lo llevó el humo del cigarro.

Aug 16, 2013

Ahora.

¿Qué vas a hacer ahora? Ahora que el camino no se pinta de colores con cada paso que das. "Es hora de dejar de ser una niña". De caminar erguida, con paso firme y marcado, y sobretodo: sola. 
¿Qué vas a hacer mañana? Cuando las luces no te guiñan más el ojo, y no haya tiempo para deliberar, cuando la añoranza de lo que ya pasó no te deje respirar. 
¿Qué hiciste? Qué fue lo que hiciste para terminar así. Hundida en un muro de metal de esos que no caen si no es con bombas, las mismas que asesinaron a tantos hermanos, poco tiempo atrás. 
Ahora sin muros, después de un par de bombas, ya no hay nada que derrumbar. Es como si todo se hubiera quedado atrás. Y, ¿qué harás? Ahora que la ingenuidad no te sale ni tratando, y la inocencia siquiera mencionarla está de más. Ahora que el mundo golpeó suficiente, y no hay marcha atrás.
Pues, qué les diré... Caminar.

ART

- What are you going to do now?- she asked.
Well... I'll miss her. For the rest of my life.
Once again, she left.

Aug 14, 2013

Punta de la Nariz

Mi amor es como el viento
sobre el mar y su matiz,
como la mirada, un suspiro,
como la punta de la nariz.

Y mi vida es como el agua,
clara pero sin ver,
como la madera en la fogata
que se quema sin saber.

Mis manos se mueven solas
y mis palabras no paran de hablar,
se me va desoladora
la razón en mi compás.

Y es mi herida un gran desierto,
mi sangre cae de perfil,
como el alba me confieso,
como la punta de la nariz.

Cada gota de silencio
que se pierde en ansiedad,
cada cruz que va matando
cada fe, cada verdad.

Me veo loca sin sentido,
soy todo menos respirar,
vivo sola en un cumplido,
en un coro derramar.

Como el aire ya no siento
mas que el verso que escribí,
como el sueño sin deseo,
como la punta de la nariz.

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Una luz artificial
encierra momentos, joyas plateadas,
una muerte celestial
puede dejar la entrada en llamas.

Frío penetrando hasta los huesos,
un estornudo que no quiere salir,
captando señales desde el cielo
que tocan hasta la punta de la nariz.

Pequeños destellos a la lejanía,
suenan tal cual el mar,
parpadeando cuando se nubla la vista
de tanta tierra y polvo soplar.

Goteando las montañas, los árboles,
se siente en todo el corazón,
como el extremo de las hojas punzantes
cortando a fondo una pasión.

¿Has visto acaso un milagro?
¿o un sueño hecho realidad?
Yo veo un techo blanco
y siento un ángel guardián.

Y he escuchado hoy un "te amo",
en el oído, en los ojos, en la nariz,
un grito por detrás delirando
y un alma que fue libre por fin.

El vestido de gala estoy usando,
en esta noche de luna llena,
duermo con vos casi temblando,
mi cuerpo tenue entre tus piernas.

Un abrazo, un beso en la frente,
orejas de gata que ya se van,
ojos que no miran, pero sienten,
sólo quedate a desayunar.

La vida en un hilo, cabeza en alto,
los tacones suenan: una luz.
Cartera en mano y un cigarro,
camino siguiendo el mismo azul.

Y lloro en locura, lloro en descanso,
se derrite la nieve en el carril,
del pelo una flor se va deslizando
y cae en la punta de mi nariz.

ART